Mercosur-UE: puede ser la llave para la reforma laboral y previsional advierten pymes y cooperativas

El contador Gustavo Casciotti, consejero Administrador del Banco Credicoop y presidente de la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme), estuvo el pasado viernes en Azul en una charla organizada por la Comisión de Asociados del Banco Credicoop Filial Azul.

La charla debate realizada en la sede de Fedecoba tuvo como denominación “Coyuntura económica nacional, no es un error, es el modelo”.

Gustavo Casciotti charló con Radio Azul sobre diversos aspectos de la realidad económica argentina y se refirió al recientemente anunciado acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea (UE).

El dirigente pyme señaló: “Una de las cuestiones sustantivas por las que consideramos que este acuerdo no es beneficioso para el país, es que no tiene en cuenta las asimetrías que tienen los dos bloques comerciales, como es un mayor desarrollo en cuanto a nivel tecnológico y de la industria de Europa frente a los países del Mercosur”.

“Convengamos que la letra chica no la conocemos, tampoco lo conocen los europeos, porque hay una fuerte resistencia, Francia se expresó con claridad: “No estamos en condiciones de cerrar este acuerdo hasta que no veamos la letra chica y que veamos de que manera están protegidos los intereses de nuestros productores agropecuarios”, con lo cual insisto, es una declaración”, insistió Casciotti.

“Muchos lo ven como un golpe de efecto en el marco de un año electoral y también, vamos un poco más allá, algunos lo interpretan como un Caballo de Troya- aseveró el referente cooperativo- para justificar la aplicación de la famosa reforma laboral y previsional, que bajo el amparo de ser un requisito necesario para aumentar la competitividad, frente a este acuerdo con la Unión Europea (UE), tendría para algunos mayores chances de prosperar lo que hasta ahora ha sido un tema, en buena hora, resistido”.

“Lo cierto es que si esto prosperara en los próximos años significaría a nuestro entender un aumento de las importaciones de bienes terminados con la consecuente demanda de dólares, para pagar esas importaciones, y una caída de las exportaciones.

Si bien en principio los grandes ganadores serían los grupos concentrados vinculados con los agro-negocios, estaríamos perdiendo nuestro principal mercado que es Brasil, porque, obviamente, en el marco de este acuerdo, Brasil terminaría comprándole gran parte de los productos que hoy le vendemos, a la Unión Europea.

“Es sumamente grave, no vemos ningún beneficio para el país, y de alguna manera lo visualizamos como una vuelta a la colonia, donde terminábamos nosotros exportando a Inglaterra el cuero para comprar los zapatos”, graficó Gustavo Casciotti sobre el acuerdo Mercosur-Unión Europea.











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