En el texto, les piden a los dirigentes dejar de lado “las diferencias personales y las conductas chicaneras” y ponerse a la altura de los trabajadores y sus familias.
Si bien en el comunicado repudian “todo hecho de violencia” se solidarizaron con los “compañeros municipales del STMA” y le piden al Ejecutivo el pronto esclarecimiento de lo ocurrido el pasado miércoles cuando dos dirigentes de ese sindicato ingresaron al sector de RRHH y, de acuerdo a lo denunciado penalmente, violentaron a las trabajadoras.
El Consejo Directivo de la CGT desconoce la presentación de una denuncia formal ante la justicia y lo expreso por las trabajadoras del sector y sostiene “No se puede acusar de violenta a una organización de trabajadores a partir de dichos, ya que la organización sindical la componen todos sus afiliados y sus familias” y que, de este modo, “todas la luchas gremiales o sociales y quiénes las llevemos adelante pasaremos a ser violentos por el solo hecho de reclamar”.
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